Los escondites de la Suerte

Por ada el 08 marzo 2013 en Psicología | Reflexiones | Salud | Sociedad

En la anterior entrada ( para quien la recuerde) hablamos del valor de la escritura manual.

Para cambiar un poco aquí tienen la nueva entrada escrita a mano .

Como entiendo que mi letra puede resultar no tan legible como me gustaría, la acompaño con la transcripción a máquina.

Vas caminando por la calle y por causa de unas obras en una fachada hay una escalera apoyada al borde de la acerca. Con lo que o pasas por debajo o tienes que caminar por la propia carretera. Observé que la gente que llegaba a la escalera: dudaba.

¡Por qué?¿Qué puede imponer una escalera abierta?No se les iba a caer nada encima… Realmente por mucho que las sociedades evolucionen y se modernicen , seguimos siendo supersticiosos.

El número 13, pasar por debajo de las escaleras, pasar la sal en la mano, lo de los gatos negros,… Todo es huir de la mala suerte y atraer la buena hacia nosotros/as.

Generalmente, como la buena y la mala suerte no sabemos realmente dónde están o dónde se esconden , las supersticiones nos ayudan  a pensar que tenemos algún tipo de control sobre ellas, que haciendo o dejando de hacer determinadas cosas la atraemos o repelemos. La incertidumbre es algo que nunca le ha gustado al ser humano, por eso nos empeñamos en buscar comportamientos , pensamientos o rituales por absurdos que parezcan para convencernos  de que no estamos  sometido a los caprichos del azar.

A veces no hace falta recurrir a supersticiones comúnmente compartidas, cada persona puede tener su propio repertorio, fruto un poco también de la experiencia: recuerdo uno de los exámenes que suspendí en la carrera. Esa día estrenaba una camiseta. Desde entonces estuve un  tiempo intentando evitar la ropa nueva los días de exámenes ( ¿!).
¿Puede existir alguna relación real entre estrenar ropa y suspender un examen? Lo más racional es responder que no, pero mi impulso fue ése. Y esto se llama «correlación ilusoria «. Reconocemos que hay cosas que se nos escapan a nuestro control ( la dificultad de las preguntas, los temas que caen…) y nos inventamos formas de controlarlas.O de intentarlo.

En fin, que no somos tan racionales como creemos. Al final somos animalitos a los que les gusta verse como racionales. Buenos días y buena suerte!

 

You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 You can leave a response, or trackback.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *