Cultivando la confianza

Por ada el 26 marzo 2014 en Psicología | Reflexiones | Sociedad

Hace poco un amigo mío decidió prestar a otra persona una importante suma de dinero para abrir un negocio. La idea daba un poco de vértigo, pero él se mostraba muy seguro de lo que hacía, me comentaba que confiaba en esa persona, en que haría todo lo posible por devolverle el dinero y en que lo destinaría exclusivamente para aquello que se había acordado.

Ganar la confianza de los demás es una carrera de fondo. No podemos hacer prácticamente nada concreto un día que nos permita ganarnos la confianza incondicional de un/a  amigo/a , de nuestros/as hijos/as o de nuestra pareja. Digamos que es el resultado de superar muchas pruebas a lo largo de la relación.

lovers-353521-mSin embargo la confianza es tan difícil de ganar como fácil de perder. Basta una sola prueba de deslealtad para perder la confianza de alguien durante mucho tiempo. Después del consiguiente enfado, posiblemente con el tiempo retomemos  la relación donde se dejó , pero recuperar la confianza es algo mucho más lento y costoso.

Para «ganar» o reforzar la confianza de los demás en nosotros/as tendremos que procurar, entre otras cosas:

1. Ser coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos: si por ejemplo me declaro una  persona ecologista, que al menos se vea me esfuerzo en reciclar y ahorrar agua y luz.

2. Cumplir aquellas cosas con las que nos comprometemos, sobre todo si implican a los demás

3. Ser honestos/as: si alguien se interesa por nuestra opinión la valorará como más auténtica si no siempre es la que sabemos que le agradaría. Cuando le digamos que pensamos que ha hecho algo bien, realmente sabrá que somos  sinceros/as. En este sentido también es importante decir cómo nos sentimos tal cual, aunque la otra persona pueda enfadarse.

4. Evitar hacer comentarios a terceras personas de sentimientos u opiniones que no hemos compartido con las personas implicadas. Si Pepe se entera a través de otras personas de que tengo un problema con él, es más probable que dude de nuestra relación de confianza.

 

Como podemos ver, la confianza casi siempre funciona de forma recíproca, las personas suelen confiar más en nosotros/as cuando comprueban que confiamos en ellas. Al mismo tiempo tiene relación con la confianza y la imagen que tenemos de nosotros/as  mismos/as :  Tendemos a asumir de forma inconsciente que los demás son como nosotros, y si no nos consideramos personas dignas de confianza porque nuestro autoncepto es negativo, difícil será que veamos a los demás como personas en las que podemos confiar.

La confianza es en realidad un acto de valentía, significa apostar y arriesgarse: nosotros/as elegimos a las personas en las que decidimos confiar, y dentro de ese juego está la vida.

You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 You can leave a response, or trackback.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *