Hace poco estuve impartiendo un taller de Búsqueda de Empleo. Cuando tocamos el tema del curriculum vitae, observamos que mucha gente traía un curriculum elaborado, pulcro, correcto. Sin embargo, al preguntar por qué ponían de una forma concreta una determinada información, no sabían explicarlo.
Partiendo de un mínimo de calidad, puede valer más lo personal que lo correcto.
No vamos a poder controlar nunca la impresión que despertamos en otros, pero nosotros nos conocemos como para saber siempre podemos buscar qué es lo que posiblemente nos diferencia. No está demás seguir unas pautas generales, hay unas plantillas estupendas en Internet y también hay personas muy entendidas en el tema que nos pueden dar unos consejos interesantes. Pero siempre son eso, consejos, y la última palabra la tienes tú.
Creo que hay cosas que no podemos dejar que hagan o decidan otros/as por nosotros/as. Ni aunque sepamos que lo pueden hacer mejor.
En el caso del cv, por ejemplo, tienes que sentirte totalmente identificado/a con él, convencido/a de todo lo que expone y satisfecho/a.
Recuerda que estarás solo/a ante la entrevista cuando tengas que defenderlo, y posiblemente tengas que dar explicaciones de todo lo que has escrito.
Pasa lo mismo cuando tengo que pedirle un cambio concreto a otra persona; podemos emplear un intermediario, pero nunca le va a poder explicar de forma tan completa y exacta como nosotros/as lo que necesitamos realmente.
A veces subestimamos nuestras propias capacidades o nuestro criterio, cuando no hay nada de malo en escuchar al sentido común o la propia intuición para saber qué nos conviene en cada caso.
Que tengan el día que realmente quieren:)