Hace poco me tocó esperar en el dentista, casi una hora. Debido a urgencias, junto con cuestiones de planificación y a saber qué más…:(
Realmente me doy cuenta de, si bien nos quejamos de no tener tiempo para nada, no sabemos qué hacer con el tiempo que nos llega de forma inesperada, cuando no estamos preparados/as.
¿Por qué nos molesta tanto esperar si precisamente no nos piden que hagamos nada? Se me ocurren varios motivos:
- Nos hacen esperar, por lo que , desde fuera de nosotros/as, hay alguien que controla nuestro tiempo, nuestros recursos.
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Cuando llevamos todo el día continuamente ocupados/as, nos trastoca vernos sin nada a lo que atender y lo vivimos como una experiencia estresante. (Peor si el móvil se quedó sin batería).
- La prisa. Después de esta cita, tenemos otro compromiso, que puede retrasarse si necesitamos comerle tiempo para finalizar la primera tarea.
¿Qué podemos hacer para prepararnos ante las posibles esperas sin ponernos de los nervios?
- A ver, hay situaciones en las que son más previsibles los retrasos que en otras: las citas médicas, de estética,en el aeropuerto,…A la hora de organizarnos es mejor dejar un margen hasta comenzar la siguiente tarea; es preferible que nos sobre una hora de tiempo a que nos falte…
- Aquí podemos llegar con algo para hacer: un libro, llamadas de teléfono,organizar la semana con la agenda, algún ejercicio de relajación con auriculares,.. hay muchas cosas que tenemos pendientes por hacer y que realmente se pueden realizar en casi cualquier sitio.
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Recuerda que por ponerte más nervioso/a el tiempo no va a pasar más deprisa, pues tiene su propio ritmo, que no tiene por qué ser el mismo que el tuyo 😉